“La asistencia alimentaria pasó de tres mil a treinta mil canastas alimentarias por la pandemia“, aseguró en diálogo con PáginaI12 el intendente de Morón, Lucas Ghi. El jefe comunal pone el foco en una de las consecuencias que va dejando la pandemia de coronavirus en el Conurbano. El dirigente de Nuevo Encuentro, que integra el Frente de Todos, destacó que “si bien la tasa de contagios es alta, estamos duplicando cada treinta días, cuando un mes atrás lo hacíamos en la mitad del tiempo“. Su expectativa es que comience a retraerse el nivel de propagación de la enfermedad. Ghi destacó que ya comenzaron “a definir una agenda pospandemia“, que tiene a la obra pública como uno de sus pilares.
–¿Como está la situación sanitaria en Morón?
-Estamos, pareciera, en una estabilidad alta. Con un nivel alto de contagios, pero estable, duplicando cada treinta días, que es un dato alentador porque hace un mes estábamos duplicando en mucho menos tiempo. Tenemos una tasa de ocupación de las camas de terapia intensiva que oscila entre el 73 y el 74 por ciento. Si bien hay margen todavía en cuanto a la aparatología, empieza a ser un número bastante sensible el factor humano porque trabajar durante tanto tiempo de manera tan exigida, hace que el riesgo de error crezca y en este caso el error implica contagiarse y eso desarticula todo un equipo. Si se contagia un terapista, también se va un kinesiólogo, se va un enfermero, posiblemente afectará también a alguien de mantenimiento, por lo que la medida hoy a garantizar es, como lo fue desde el principio, el cuidado de los profesionales, algo en lo que estamos siendo especialmente celosos. Para esto estamos dando algunas licencias especiales para abordar esta situación que es de mucho estrés y agotamiento. En el municipio armamos un comité de crisis en el hospital municipal para hacer un seguimiento de los profesionales y los trabajadores de la salud en general que están en la primera línea. La idea es que si se detecta alguna situación de las descriptas, de manera preventiva pedirle al profesional que se licencie y descanse.
–Hay signos de amesetamiento y el gobierno nacional y el provincial comenzaron a anunciar algunas medidas para la pospandemia. ¿Cómo está pensando lo que vendrá para su distrito?
-Apostamos a una agenda ya diseñada de pospandemia que abarca al sector privado y otra con el Estado nacional y el provincial. Por la pandemia quedó suspendido el desarrollo que teníamos planeado y que forma parte de nuestro programa de gobierno. Tenemos planeado desde instalaciones industriales hasta distintos desarrollos inmobiliarios. Por lo pronto estamos pasando una hoja de ruta para que todos los sectores puedan tener certidumbre en cuanto a cómo va a ser el último trimestre de este año. Por otro lado tenemos una agenda específica con la provincia y con la nación que implica mucha obra pública como la extensión de la red de agua y cloacas y la puesta en vigencia en el último trimestre de este año de un módulo del Procrear que incluye un desarrollo urbanístico de 120 viviendas. La ampliación de un parque industrial que tenemos en nuestra ciudad, La Cantábrica, y la intervención de diez espacios públicos que tenemos en el marco del programa Argentina Hace con el ministerio de Obras Públicas también componen parte de esta agenda.
–¿Cómo percibe la recepción del aislamiento y el distanciamiento obligatorio en los vecinos?
–El balance de la conducta de los vecinos es positivo. Hay un gran apego a las normas, a cuidarse y a cuidar al otro. En Morón tenemos 85 mil adultos mayores que han hecho un esfuerzo muy importante permaneciendo aislados. Incluso uno ve esa conducta con los más chiquitos que acompañan a sus padres y saben perfectamente lo que pueden hacer.
-Esto se contrapone con algunas decisiones de la oposición…
–Claramente se ven consignas completamente irresponsables, así como actitudes irresponsables. Creo que la oposición tiene una mirada desaprensiva e indulgente con la pandemia. En relación al liderazgo que ejercen y cómo administran su predicamento con una parte de la sociedad hay un sector de la oposición, que es el que no tiene responsabilidad de gestión, que se mostró muy imprudente y de una manera poco adulta. Vale diferenciar a otro sector de la oposición que tiene que gestionar, que tiene que pagar sueldos, en la que la forma de relacionarse con la pandemia es totalmente distinta. Creo que es muy interesante el ejercicio que tuvimos que hacer con los municipios vecinos. Yo limito con Tres de Febrero, Hurlingham y La Matanza y cada vez que tenemos que llegar a tomar definiciones sobre el aislamiento y las habilitaciones que se puedan hacer tenemos que tener diálogo permanente, porque si yo digo una cosa y no nos acompañamos se hace muy difícil para los vecinos. La pandemia nos empujó a profundizar el diálogo entre nosotros para coordinar, compartir información y tomar decisiones.
–¿Tuvo algún reclamo policial en Morón?
–Hubo reclamo pero fue esencialmente personal exonerado, retirado y muy poco personal en actividad. Los servicios se siguieron prestando y no hubo ningún contratiempo. La coordinación con la provincia a través del ministerio de Seguridad durante esos dos o tres días fue fluida, así como con el ministerio de Seguridad de Nación porque también recibimos refuerzos de fuerzas federales para no desatender ningún objetivo y funcionó a la perfección. Ahora estamos a la espera de la implementación del Plan Integral de Seguridad para mejorar el área.
–¿La pandemia generó mayores necesidades en la población?
–La situación a abordar desde el minuto cero de la pandemia, porque fue muy lesiva en todo sentido. Tuvimos que aumentar mucho la asistencia directa en términos alimentarios. Nosotros veníamos con un promedio de tres mil canastas alimentarias mensuales. Hoy estamos en treinta mil del municipio a lo que se suma la asistencia alimentaria escolar con treinta mil más, y llegamos a sesenta mil familias en Morón mensualmente, esa fue una de las consecuencias de la pandemia más fuerte. Por el lado económico y productivo nosotros tenemos dos líneas de trabajo: por un lado ser el vehículo a través del cual todas las empresas, comercios y quien lo necesitase pudiese acceder a las políticas del Estado Nacional como las líneas de crédito de asistencia al trabajo y la producción. En el mismo sentido con los programas del gobierno provincial como el Preservar Trabajo donde conseguimos que al menos trescientas empresas y alrededor de ochenta empresas y comercios que están pagando vía este programa. Por otro lado, generamos un fondo íntegramente constituido por fondos municipales que se llama Sostén.
Fuente: https://www.pagina12.com.ar/293594-lucas-ghi-la-asistencia-alimentaria-paso-en-pandemia-de-tres