Kamala Harris pidió a Guatemala trabajar juntos para que la gente "no se vaya"

La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, expresó en su gira por Guatemala que la migración es “prioridad” para el gobierno de Joe Biden, aunque remarcó que su país seguirá “asegurando la frontera”. En su primera visita oficial al exterior, Harris dijo que se centrará en temas como la vacunación contra el coronavirus, la lucha contra la corrupción y la cooperación para encarar las causas de la migración ilegal. Al tiempo que le pidió al gobierno de Guatemala trabajar en conjunto para que la gente “no se vaya de su casa“, la vicepresidenta le envió un mensaje contundente a los inmigrantes que planean ingresar a Estados Unidos sin papeles: “No vengan”.

“El hecho de elegir a Guatemala y México para mi primer viaje al extranjero refleja la importancia que el presidente Biden le asignó a esta región”, remarcó Harris al ser recibida por el presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, a quien expresó el interés de trabajar en conjunto. Del encuentro, celebrado en el Palacio Nacional de la Cultura, participaron el canciller de Guatemala, Pedro Brolo; el enviado especial de Estados Unidos para el Triángulo Norte de Centroamérica, Ricardo Zúñiga, y el asesor de Biden para América Latina, Juan González.

Harris consideró que quienes migran “están huyendo de algún daño o simplemente no pueden satisfacer sus necesidades básicas quedándose en casa“. Por eso, la vicepresidenta estadounidense reiteró que es necesario darle a la gente “un sentido de esperanza, de que la ayuda está en camino”, en una región duramente golpeada por la covid-19, la violencia y la pobreza, situación que se agravó en 2020 por el paso de dos huracanes. 

Harris anunció en ese sentido un puñado de iniciativas que incluyen un grupo de trabajo conjunto para combatir la trata de personas y el contrabando, una misión anticorrupción y el envío de medio millón de vacunas contra el coronavirus. Sin embargo, la primera mujer en ocupar el cargo de vicepresidenta de Estados Unidos fue severa con los inmigrantes ilegales. 

“Estados Unidos seguirá aplicando las leyes y asegurando la frontera”, remarcó Harris al respecto. “Hay métodos legales por los que la inmigración puede y debe ocurrir. Creo que si llegan a nuestras fronteras serán rechazados, así que desanimemos a nuestros amigos, nuestros vecinos y los miembros de nuestras familias de embarcarse en un viaje además muy peligroso, del que los únicos que se benefician son los coyotes”, agregó la exfiscal de la nación.

Apenas asumió la presidencia, Biden suspendió las deportaciones de migrantes por 100 días, presentó un proyecto de ley para regularizar a los 11 millones de inmigrantes indocumentados estimados en el país, y empezó a admitir a algunos solicitantes de asilo que llevaban meses esperando en campamentos en México. Solo en lo que va de año se han contabilizado más de 200 mil intentos de migrantes de la región para ingresar a Estados Unidos.