“Debo reconocer que he cometido un gran error”, dijo Javier Benítez, el autor de la nota que trató de traidor al Presidente Alberto Fernández. La nota publicada por Sputnik, la agencia de noticias rusa causó revuelo en la Argentina donde el sistema de medios leyó una como respuesta oficial del gobierno ruso a las posiciones públicas del mandatario argentino durante su gira europea. Benítez habló en una entrevista de Radio Con Vos. Explicó que publicó la nota en su nombre y que el error “ha sido no trabajar bien el texto” en el que transcribió sin comillas opiniones de un especialista. Cuando le preguntaron si no hubo acuerdo de editores y supervisores, repitió: “Yo asumo todo el error”. Página12 había adelantado un día antes que la nota no reflejaba la posición oficial del Kremlin, a partir de una fuente de la organización periodística.
“Está bien que me hagas esa pregunta”, le dijo el periodista uruguayo a su colega Ernesto Tenembaum durante el programa de radio. “He visto muchos medios argentinos que han dicho que si esto está escrito tiene el aval del Kremlin, como que el Kremlin revisó todo. Y lo primero que tengo que aclarar es que nosotros no respondemos frente al Kremlin. Y en este caso hice como una transcripción, aunque muchas cosas no las entrecomillé, ese fue mi error, hice una transcripción de la entrevista de audio que le hago a un analista, doctor en ciencias políticas”.
Y agregó sobre la Agencia: “Todo lo que sale ahí, depende de la visión del autor y en este caso, de lo que se desprendió de la entrevista que hice”. “Debo reconocer que he cometido un gran error que ha sido no trabajar bien el texto, no redactarlo bien. Viéndolo con perspectiva fue un error grande en el sentido de la presentación. Eso es lo que tengo para decir”. Y luego: “Se le dio demasiada importancia porque siempre lo que importa es lo que dicen las autoridades, y no lo que dice un periodista o un analista”.
Benítez había escrito cosas como esta: “El nivel de traición del presidente argentino hacia su par ruso está fuera de duda y fuera de concurso”. “Luego de que Rusia haya sido la gran ayuda de Argentina al suministrarle vacunas Sputnik V” y “tras la ‘hazaña’ del mandatario argentino de impulsar la expulsión de Rusia del Consejo de Derechos Humanos, ahora se despachó a gusto en su visita a Alemania”.
Este diario publicó en su edición del lunes información de una fuente de la organización: “No es una nota oficial de la Agencia, es una nota de opinión, no la firmó un editorialista, es un texto plagado de adjetivos y tampoco viene de América Latina”.
¿Qué es Sputnik?
Sputnik es la agencia oficial de noticias rusa como la BBC o Telam en Argentina, dijo Benítez. Según fuentes diplomáticas, a diferencia de otras empresas de la federación rusa donde gran parte de las compañías estatales, Sputnik es una empresa estatal pero además parte del gobierno. Tiene sede en Moscú donde funciona también un espacio de habla hispana para América Latina. También tiene sedes en distintos países. Con la guerra perdió muchos periodistas y ha comenzado a reemplazarlos con profesionales a los que le falta entrenamiento, según informa la misma fuente diplomática. Benítez en ese sentido aparece como representante de esos cambios, un periodista, ni firma de renombre ni editorialista.
La Agencia se maneja con una línea editorial con lista de países divididos en tres categorías: países amigos, otros con más o menos de cierta distancia y otros llamados hostiles. Argentina está entre los más o menos distantes como México y Brasil. Siempre según los datos que maneja la fuente diplomática, entre los países amigos está Cuba, Venezuela, Bielorrusia y ya no está Nicaragua. Entre los países hostiles, está Gran Bretaña, España, Francia y entre otros Estados Unidos. La línea editorial y esa lista funciona así como encuadre de tratamiento de la relación con los Estados.
La diplomacia
El dilema en este momento es la delicada situación con Argentina. “La relación con Rusia comenzó a deteriorarse claramente después del voto a favor de la suspensión de Rusia en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas”, explica la misma fuente. “La gira de Fernández no fue buena en ese sentido. Las relaciones políticas entre los países están construidas sobre el uso y cuidado sofisticado de cada palabra, tomaron nota de todo lo que dijo el Presidente y aunque en este momento la prioridad de Moscú no es Argentina, estamos atentos. Rusia no actúa de manera inmediata, actúa lento con una estrategia más a largo plazo”.
En ese contexto, la publicación de Sputnik causó inquietud en esos círculos diplomáticos. Apenas leída la noticia, un habitúe de esos espacios se preguntó si no era hora de acelerar agenda de visitas con el Kremlin. Uno de los temas pendientes e inmediatos son las vacunas. Argentina se comprometió a comprar, aunque sin firma, 7 millones de vacunas. Moscú preguntó varias veces a la embajada qué harían con eso. El país aún no respondió. La decisión de la OMS de no autorizar la vacuna y el stock que tiene el país en este momento retardó la respuesta de una compra que, según la misma fuente, ya no se necesita.
Las aclaraciones de Benítez y el error sólo calmaron las aguas. Los mismos círculos creen que la nota estuvo amparada por aquel tipo de autorización editorial más amplia: notas con autorización para criticar pero no de manera exagerada a los países que están ni cerca ni lejos. Allí creen que, en este caso, la crítica estaba habilitada editorialmente pero el periodista se fue de boca.
Fuente: https://www.pagina12.com.ar/422318-el-periodista-de-la-agencia-sputnik-dijo-que-todo-fue-un-err