El Gobierno oficializó la renuncia de Cristina Kirchner a cobrar su sueldo de vicepresidenta

El Gobierno nacional oficializó la decisión de Cristina Fernández de Kirchner de renunciar a su sueldo de vicepresidenta. La resolución rige desde el 1 de abril y se tomó después de que la expresidenta enviara una carta dirigida al secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, en la que expresaba su decisión de prescindir de los haberes que le corresponden por su actual cargo.

La Resolución 145/2021 de la Secretaría General publicada este miércoles en el Boletín Oficial expresa: “Tómese conocimiento de la renuncia a la percepción de haberes correspondientes al cargo de Vicepresidenta de la Nación, a partir del 1 de abril de 2021, realizada por la Dra. Cristina Elisabet Fernández de Kirchner”.

CFK tomó la decisión de renunciar a su sueldo como vicepresidenta a mediados de marzo, después de que la Justicia le restituyera su asignación vitalicia mensual por haber ocupado la Presidencia de la Nación durante los períodos 2007-2011 y 2011-2015. La exmandataria informó a Vitobello de su decisión a través de una carta en la que agregó que también renunciaba al privilegio de no pagar el impuesto a las Ganancias.

La vicepresidenta explicó en la carta que su decisión “obedece a haber sido notificada el día de ayer -la carta está fechada el 5 de marzo- de la Resolución de Anses Nro. COM-A 02503/21 de fecha 03 de marzo de 2021, por la cual se me restituye la asignación mensual vitalicia en mi carácter de expresidenta de la Nación durante los periodos 2007-2011, 2011-2015, de la cual había sido ilegítimamente privada durante la administración de Mauricio Macri”.

“Quiero dejar expresa constancia que, si bien de acuerdo a la normativa vigente tengo legítimo derecho a percibir mis haberes como Vicepresidenta de la Nación, es mi decisión renunciar al mismo”, expresó CFK, al tiempo que reafirmó su decisión de pagar Ganancias y recordó que “como todos y todas sabemos” los integrantes de la Corte Suprema de Justicia gozan de ese privilegio de no pagar dicho impuesto.