Desde que perdió en forma inesperada y devastadora en las elecciones primarias, el presidente Mauricio Macri ha anunciado una serie de medidas para ganarse nuevamente a las clases medias, muchas de las cuales iban en contra de lo que proponía su gobierno. Pero, peor aún, varias terminaron en una marcha atrás o en la nada. La suba del mínimo no imponible de Ganancias y la eliminación del IVA para los alimentos básicos terminó con un fallo de la Corte Suprema reconociendo que no se podía afectar las cuentas de las provincias. Pero no es el único: el bono para los trabajadores del sector privado se diluyó en un pago a cuenta de paritarias y en indefinidas cuotas. Las medidas sobre la AUH no resultaron suficientes para los movimientos sociales, que pelearon y obtuvieron la Emergencia Alimentaria. El aumento de las becas Progresar se hizo tras años de recortes sobre el programa. El congelamiento de combustibles fue rápidamente levantado. El reperfilamiento de la deuda está estancado en el Congreso.
Tres días después de la derrota en las PASO, el Gobierno anunció que subía el mínimo no imponible a 55.376 pesos para un trabajador soltero y en 70.274 pesos para un trabajador con cónyuge a cargo y dos hijos. También dispuso un no pago extraordinario de los impuestos al trabajo por dos meses (septiembre y octubre) hasta un tope de 2 mil pesos. Por su parte, los monotributistas no pagaron el componente impositivo en septiembre. También anunció la eliminación del IVA para la canasta de alimentos básicos hasta diciembre. La medida afectó el presupuesto de las provincias por lo que, luego de un diálogo frustrado, 15 gobiernos provinciales recurrieron a la Corte Suprema, lo que terminó en el fallo con el gobierno nacional teniendo que ver de qué manera les repone los fondos a las provincias.
No bono. Pero no fue la única de las medidas que lanzó el Gobierno posderrota y que terminó teniendo o una marcha atrás o quedando en la nada. Otro caso fue el bono para los trabajadores registrados del sector privado. Surgió de una reunión con la CGT en la que iban a hablar de emergencia alimentaria y terminaron discutiendo reapertura de paritarias y el bono. La CGT indicó que se lo habían dado como un hecho. Tras hacer silencio por un día, finalmente, el ministro de Producción, Dante Sica, reconoció que iban a decretar un bono. Tras las presiones de empresarios, ese bono quedó por semanas en suspenso y hasta llegó a estar en duda que finalmente saliera. Al final, lanzaron algo que es a cuenta de las paritarias y que tiene una cantidad de cuotas según defina el sector. Ya no le dicen bono, sino “refuerzo”.
AUH. El Gobierno también dispuso un pago extra para quienes reciben la AUH de mil pesos en septiembre y octubre. No obstante, las organizaciones sociales lo consideraron insuficiente y pelearon la prórroga de la emergencia alimentaria y un aumento de las partidas. El Ministerio de Desarrollo Social, que conduce Carolina Stanley, se resistió todo lo que pudo, pero finalmente cedió y la ley fue aprobada en el Congreso. En cambio, tanto María Eugenia Vidal como Horacio Rodríguez Larreta lograron bloquear versiones locales de esa ley.
Reperfilamiento. Otra medida que lanzó el Gobierno fue el reperfilamiento de la deuda privada. Primero anunciaron que iban a mandar un proyecto de ley al Senado de inmediato. Se retrasaron una semana. Y luego se postergó por tiempo indefinido, mientras que el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, esquivaba su visita al Congreso. Finalmente, Lacunza fue y lo presentaron por Diputados y no por el Senado y sin acuerdo previo con la oposición, que era el motivo que habían dado para demorar el proyecto. Luego de que el peronismo dejara trascender que era preferible que Macri optara por un DNU, es altamente improbable que el proyecto de ley que presentó el Ejecutivo avance este año en el Congreso.
Combustibles. Macri, en su raid posderrota, también anunció que congelaba el precio de los combustibles por 90 días, una medida que siempre resistió y que va en contra de lo que fue su política de tarifas: aumentos masivos sobre los usuarios y en beneficio de las empresas. No obstante, recibió presiones del sector que le hicieron finalmente levantar la medida poco después. El motivo que encontraron fue la disparada del barril de petróleo por el ataque con drones a dos terminales petroleras de Arabia Saudita. No hubo congelamiento por 90 días.
Becas. El Gobierno anunció una suba del 40 por ciento en las becas para estudiantes. No obstante, un estudio en base a datos oficiales de la socióloga María Laura Lombardía, muestra que en el Gobierno de Macri asi medio millón de jóvenes perdió el beneficio, que la inversión en ese área cayó a la mitad y que el monto que perciben fue pulverizado por la inflación por la falta de incrementos año a año: pasó a representar un tercio de la cifra original. Además, se pasó del concepto de un programa integrar a “becas”, destinadas a un grupo menor de personas.
Fuente: https://www.pagina12.com.ar/222880-macri-y-una-bateria-de-medidas-sin-futuro