Tregua virtual en el Congreso

Tras el debut de las sesiones virtuales, el Congreso se toma un respiro en las disputas políticas más álgidas. Mientras se aceita el funcionamiento remoto de las comisiones, ambas Cámaras legislativas avanzarán la semana próxima con temarios consensuados. 

Luego sobrevendrían los proyectos que dividen aguas entre el oficialista Frente de Todos y la principal bancada opositora de Juntos por el Cambio. La agenda incluye, entre otros temas, el tributo extraordinario a las grandes fortunas y la reforma judicial del fuero federal. 

En tanto, el lunes también se conformará la comisión que trabajará en la nueva fórmula para la suspendida movilidad jubilatoria, con un plazo que vence en junio, de las que participan miembros del Poder Ejecutivo, senadores y diputados, que también deberá ser refrendada por el Parlamento.

La pandemia del coronavirus postergó una agenda que prometía un año parlamentario agitado. La histórica experiencia del miércoles pasado en la que el Congreso sesionó por primera vez en forma telemática terminó por saldar la disputa entre oficialismo y oposición sobre la forma en el que el Parlamento debía volver a sancionar leyes en medio del aislamiento social, preventivo y obligatorio.

La continuidad legislativa será, al menos en lo inmediato, de forma consensuada con temas relacionados con la pandemia. Diputados ya tiene su propia agenda, que luego de la aprobación del protocolo para el funcionamiento virtual, pasará por el debate remoto en comisiones.

El lunes, la Cámara baja arrancará con la comisión de Acción Social y Salud Pública para abordar los proyectos sobre las prescripciones médicas digitales. El martes, la comisión de Educación buscará adecuar la educación a distancia en tiempos de pandemia.

Ese mismo día, el debate más ríspido se dará en la comisión de Comunicaciones e Informática, donde estará en debate el proyecto del Gobierno que reemplaza a la suspendida ley de Economía de Conocimiento que Cambiemos impulsó y aprobó en el último año de su mandato.

El oficialismo entendió que la ley que otorga beneficios impositivos para el desarrollo de actividades como software, biotecnología, las industrias aeroespacial y satelital, audiovisual, servicios geológicos y de prospección y relacionadas con

 electrónica y comunicaciones, centros de exportación de servicios profesionales, investigación y desarrollo, nanotecnología y nanociencia y la fabricación bienes 4.0, favorecía a las grandes empresas del sector. El nuevo texto daría prioridad a las pymes.

El Senado sigue el mismo camino. El lunes y martes avanzará en el tratamiento en comisiones de los dos proyectos que Diputados aprobó el miércoles por unanimidad en su primera sesión virtual.

Uno es la eximición del pago del impuesto a las Ganancias –desde el primero de marzo hasta el 30 de septiembre– a los trabajadores vinculados a servicios esenciales durante la pandemia: de la salud pública y privada (profesionales, técnicos, auxiliares, de gastronomía, maestranza y limpieza); personal de las Fuerzas Armadas y las Fuerzas de Seguridad; de la actividad migratoria y aduanera, y bomberos; que incluye “una pensión graciable vitalicia para los familiares de aquellos trabajadores que perdieron la vida prestando servicios”.

El otro declara de interés nacional la protección de la vida y la salud del personal sanitario en el marco de la emergencia sanitaria declarada por el Poder Ejecutivo. Ambos se transformarían en ley en la sesión telemática convocada para este jueves.

El debate y la emisión de dictámenes en comisión de manera remota (a través de videoconferencia, con votos a viva voz y con la lubricación de firmas digitales) servirá de ejercicio para poner a punto el sistema para la futura discusión de proyectos mas complejos y en los que hay posturas encontradas.

El oficialismo espera ese momento para impulsar el anunciado “tributo extraordinario a las grandes fortunas”, cuyo texto –afirman—está listo. Un proyecto de peso en la necesidad de generar recursos propios para afrontar las consecuencias económicas de la pandemia de la covid-19, en medio de las renegociaciones del sobre endeudamiento externo que dejó la gestión de Mauricio Macri. Una iniciativa que ya tiene la firme resistencia del macrismo y sus más fieles aliados, pero que no logra arrastrar a muchos de sus socios políticos en la alianza opositora.

Otro de los temas de esa agenda más compleja es la reforma judicial del fuero federal. Un proyecto que el presidente Alberto Fernández anunció el primero de marzo en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso y que ratificó tras la puesta en marcha de las sesiones remotas en ambas Cámaras legislativas. Un proyecto que molesta e inquieta a JpC, que ya también amenazó con no acompañar la designación del juez Daniel Rafecas como procurador general.

Este lunes también se conformará la comisión especial que elaborará la nueva fórmula de la movilidad jubilatoria suspendida hasta junio de este año. Allí habrá –además de los tres representantes del Ejecutivo— cuatro senadores y cuatro diputados de las comisiones legislativas de Presupuesto y de Previsión Social (representados en partes iguales por el FdT y JpC). Aunque la comisión no será parte del proceso del habitual tratamiento parlamentario, el proyecto final deberá ser refrendado por el Congreso.